Bizcocho de almendras y nueces

Al comienzo de mes decía que este iba a ser un mes lleno de experiencias nuevas y así es. Nada mas empezar mes me he ido de crucero por el Mediterráneo con unos familiares y lo hemos disfrutado muchísimo.
La semana pasada me he ido a la Isla de Gran Canaria dónde he trabajado como ayudante de pastelería en una jornada sobre repostería Canaria, en la que transformamos los postres tradicionales en postres de nuevo diseño. Se elaboraron unos diez postres, entre los que quiero destacar uno de ellos llamado los sabores de la infancia. Este postre, sólo con probarlo, nos transportaba a la niñez, ¿quien no recuerda las meriendas de plátano escachado con galletas y un chorrito de limón? Pues sí, siguiendo esta base, lo presentamos en copas de cóctel en forma de espuma, acompañado con un poco de queso y miel, espolvoreado con un poco de gofio.
No quiero ponerles los dientes largos, todo a su tiempo, poco a poco iré poniendo esas recetas, para que veáis que no son tan complicadas y que pueden estar al alcance de todos. Por ahora les voy a dejar con este bizcocho, que también elaboramos en esa jornada. Un bizcocho delicioso, húmedo y esponjoso. La receta de este bizcocho fue rescatada de una señora muy mayor que tenía una pequeña libreta con todas sus anotaciones.
Ya para acabar, quiero aprovechar para dar las gracias a las personas que confiaron en mi y me invitaron a esta jornada de la cual he sacado muchas experiencias gratificantes.

Ingredientes:
-8 huevos de tamaño M
-500 gr. de azúcar
-500 gr. de harina simple
-200 gr. de almendras
-200 gr. de nueces
-250 dl. de aceite de semillas
-250 dl. de leche
-Ralladura de un limón
-1 cuchara de canela en polvo
-25 gr. de impulsor
-Azúcar para espolvorear por la superficie

Preparación:
Para estas cantidades yo utilicé un molde rectángular de 30x25cm. y aproximadamente salen 75 porciones de 2x2 cm. Si lo quieren hacer más pequeño dividir las cantidades.

Mezclamos los huevos junto con el azúcar, hasta que estas incrementen su volumen y empiecen a blanquear, nos podemos ayudar de una batidora. Ahora los demás ingredientes los incorporamos manualmente con ayuda de una paleta y movimientos envolventes. Primero cortamos las almendras y nueces en trozos pequeños y los añadimos a la mezcla de huevos, seguimos con la leche, el aceite, la ralladura de limón y la canela.

La harina la mezclamos con el impulsor y la cernimos.  Luego empezamos añadirlas a cucharadas con movimientos envolventes a la mezcla anterior.

Precalentar el horno a 180º

Preparar el molde poniendo en el fondo un papel vegetal, pintarlo ligeramente con un poquito de aceite. Vertemos la mezcla y alisamos, espolvoreamos un poco de azúcar sobre la superficie y lo llevamos al horno  durante 30 minutos. Siempre antes de sacar el bizcocho del horno, es conveniente pinchar en el centro con una brocheta y si esta sale limpia el bizcocho estará cocido, sino lo dejaremos unos minutos mas.

Una vez cocido y frío lo desmoldamos y los cortamos en cuadrados de 2x2 aproximadamente, lo podemos decorar con una glasa real.
La glasa real la podemos preparar con una clara de huevo y 200 gr. aproximadamente de azúcar glass. Ponemos en una batidora la clara de huevo y una vez esté montada empezamos añadirle, a cucharadas el azúcar glass previamente tamizada. Añadimos unas gotitas de limón para darle aroma y ya lo tenemos preparado para utilizar

Este bizcocho mejor es comerlo en los primeros días, si pasan más de tres días, se empezará a endurecer. Yo aconsejo ponerlo en un recipiente hermético bien cerrado si no se va a consumir en dos días. ¡Buen provecho!